Get Adobe Flash player

Calendario

diciembre 2024
L M X J V S D
 1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031  

Historial

Temas

Mi Historia

El desarrollo científico y tecnológico es uno de los factores más influyentes en la sociedad contemporánea. El bienestar de la humanidad sería imposible, sin las fuerzas productivas de la ciencia, la medicina y la tecnología.

El descubrimiento de la penicilina, por ejemplo, entre otras muchas cosas más, fue importantísimo. Salvó de morir a millones de seres humanos. Anterior a este descubrimiento las enfermedades infecciosas, han causado la muerte de millones de seres humanos a lo largo de la historia de la humanidad.

Entre muchas más enfermedades temibles que padeció la humanidad, una de ellas fue la peste “negra” de mediados del siglo XlV. Aquella peste era contagiada a los humanos por los ratones negros. Por eso se llamó peste negra. Se dice que los contagios por los ratones, mataron a mucha más gente que todas las guerras que hubo en la historia del mundo.

Hay que tener mucho cuidado con los ratones, porque andan por casi todas partes. Graneros almacenes y casas. Siempre están en los lugares donde vive la gente, precisamente para poder alimentarse de nuestros productos. Además del daño de lo que estropean, todavía es peor porque orinan sobre las cosas y ésto es muy malo. Hay que evitarlo.

Las medidas fundamentales para evitar el contagio, son lavar muy bien las cosas antes de comerlas. Poner raticida en lugares estratégicos, donde no vayan los niños. Otra medida que es muy importante, es tener un lugar especialmente cerrado donde no puedan entrar las ratas, ni ningún insecto. En mi finca tengo un pequeño almacén para poner los productos comestibles protegidos. Además de las paredes, el techo lleva tela metálica, que permite que entre la luz y el aire corriente, pero que  siempre esté aislado.

En el año 1.949 llegaba la penicilina a nuestra zona, precisamente a tiempo para salvar la vida de mi padre. Le atacó una doble neumonía, de la que no se salvaba nadie. Fue tan grave aquella tremenda enfermedad, que el médico dijo que se moriría en pocos días. Lo único que se podía probar era a ponerle la penicilina, si se pudiera pagar, porque era muy cara. Se decidió pagarla porque era más importante la vida de nuestro padre, que el dinero. Aunque no había dinero, un buen ciudadano amigo de mi padre, nos lo prestó para pagar dicha penicilina, que lo salvó de una muerte casi inmediata.

Aunque costó tiempo y trabajo, el dinero se pagó y nuestro padre vivió muchos años más. Aquí tenemos una prueba más, de lo que supone una buena amistad. Sin aquella ayuda el resultado hubiera sido catastrófico.

Hay que tener en cuenta lo que supone el trabajo y la investigación. La ciencia, la medicina y la tecnología en este siglo XXl ya son importantísimas, pero mucho más lo han de ser con el transcurrir del tiempo. La lucha humana por erradicar las enfermedades y avanzar en tecnologías para mejorar el bienestar de la humanidad, es y será permanente mientras haya mundo. Porque así tiene que ser: trabajar, avanzar en los descubrimientos venideros que serán inimaginables. Esto será muy importante para el bienestar de las próximas generaciones.

La pregunta es ¿Por qué llegamos a tan grandes avances? La respuesta es muy fácil: trabajando, investigando y creando empresas y puestos de trabajo que tan necesarios son.

En esta noche, en vísperas de la nochebuena del 2015, después de acostarme y en el mayor de los silencios, mientras contemplaba el techo raso de mi solitaria habitación, descubrí un diseño para mis prótesis, que considero muy importarte. Lo significativo de todo ésto es, que después de diseñar multitud de cosas, entre ellas mis prótesis y de transcurrir 61 años desde que las llevo, aunque fueron muchas las pruebas y cambios para mejorar el funcionamiento y poder trabajar con ellas, no estaba todo conseguido, aún me faltaban cosas. Lo que quiere decir que nunca se sabe bastante. El hombre muere de viejo y aprendiendo si es activo y no se cansa de trabajar. Porque más o menos, siempre se puede hacer algo para pasar el tiempo y mantenerse en forma, ya que es necesario para la supervivencia, y también, después de mayores, para evitar el reuma y las dolencias que salen si uno no se mueve.

Pensando en lo importante de todo esto, se me ocurre escribir este artículo, para mostrar sobre todo a los más jóvenes, lo importante que es el estudiar y trabajar, ya que las dos cosas son muy necesarias. Lo primero en plena juventud es el estudio y a medida que pasa el tiempo, aprender a trabajar. La experiencia de muchos años de lucha, así lo aconseja.

Hay que ver lo importante de este tema. No solo por el diseño, también por el motivo que me llevó a buscar una solución al problema, esa lucha permanente del hombre para mejorar las cosas. Aunque es muy sencillo de construir y de aplicar a mis prótesis, lo difícil fue el dar con el diseño, pero los años de experiencia y las ganas de trabajar lo consiguieron. Lo que nos indica que no podemos claudicar, sino seguir con la lucha para conseguir las cosas. Porque si tú no lo haces, nadie lo va hacer por ti.

Hay que valorar lo que supone el ingenio del hombre por superar y combatir los problemas que se le presentan. Entre otros muchos casos más, que hay por el mundo. Porque hay gente muy inteligente y muy trabajadora que también hicieron grandes cosas. Por ejemplo mi caso: ¿Qué sería de mi vida si no me hubiera dedicado al trabajo y la investigación? Sinceramente creo que no hubiera llegado a donde estoy. Lo más probable sería que hubiera sucumbido ante tanto dolor. Ni hubiera podido formar una familia, ni construir ninguna máquina, ni tampoco podría escribir ningún libro, ni siquiera mi autobiografía, porque estaría destrozado y sin encontrar remedio al problema. Pero la necesidad, la fuerza de voluntad y el trabajo me sacaron del abismo y conseguí llegar a la meta que me propuse, el poder trabajar libre como los demás. Eso es muy grande, es lo que te produce esa tranquilidad y esa paz interior que todos necesitamos para vivir y ser sociables.

Aunque a partir de aquel accidente en el que perdí las manos, mi vida se convirtió en una lucha permanente y sin tregua, porque fue mucho lo que sufrí, dando vueltas a mi cerebro para encontrar el remedio y poder defenderme y trabajar. Pero al final, se vio el producto del trabajo y la resistencia del hombre para conseguirlo.

El movimiento, el dinamismo que siempre tuve, creo que es lo que me llevó a mantenerme en perfectas condiciones de salud. Con mis 81 años, sigo con las mismas ganas de trabajar y de diseñar como cuando era joven, y creo que permanecerán mientras tenga fuerzas, porque el trabajo, no solo me gusta, es que me divierte. Aunque con diversas limitaciones, claro. Me siento fuerte y sin problemas de salud, aunque los años no pasan en balde.

Lo bueno de todo esto, es que no puedo estar sin hacer algo. O trabajo, o escribo, o leo, pero no soporto el estar “mirando para las musarañas”. Así fui desde niño y así seguiré mientras pueda.

Lo curioso de este tema, es que aunque yo mismo fabriqué las articulaciones para mis prótesis, y trabajé con ellas muchos años, no se me ocurrió esta innovación, que es importante. Se trata de un sistema de articulaciones, con un cambio importante para evitar molestias en los codos, que algunas veces surgen y que además de molestias, hasta hacen heridas.

Precisamente estoy curando una herida que me hizo, hace unos días, en el codo derecho, por trabajar. Con este modelo ya no habrá más heridas en los codos, ya que son los que más carga llevan en el trabajo.

¿Que por qué no se me ocurrió antes este diseño? Por varias razones: una, por exceso de trabajo y poco tiempo, otra porque los inventos no salen así por las buenas. A través de la historia de los inventos, se ve como fueron modernizándose. Está bien claro: para inventar los motores eléctricos, primero hubo que inventar la energía eléctrica, cada cosa a su tiempo.

Una de las cosas muy importantes para las personas, mujer u hombre es mantenerse en forma. Si no es trabajando porque no puedan, hay que hacer ejercicios. Los ejercicios en las personas mayores son tan importantes como el pan de cada día, pero deben ser aconsejados por el médico de familia, para evitar molestias y problemas.

Os deseo muchas felicidades y un prospero año nuevo 2016, y que haya paz en nuestro planeta tierra, porque bien lo necesitamos.

Un cordial saludo.

Arsenio Fernández García.

Es muy notable la diferencia tan importante de cómo se crían los niños en estos tiempos. Bien alimentados, bien vestidos y con una preparación muy superior a la que había cuando yo era niño. No hay comparación posible con aquellos años. No había comida ni ropa ni la cultura de hoy.

Da la impresión de que son hasta más inteligentes. Cuando yo tenía la edad de Jesús mi nieto, no sabía bien ni el abecedario. El con solo seis años ya maneja la ortografía y las matemáticas. Mientras escribo algunas veces le gusta mucho mirar y aprovecho para examinarlo. Procuro escribir con faltas de ortografía para que él me las corrija. Enseguida dice, Guelito eso es una falta corrígela. Me deja asombrado del gran cambio que en poco tiempo dio en los estudios. Lo comenté con sus padres y les pregunté cómo es posible ese cambio tan notable y rápido.

-Muy fácil papá, me dijo Ana mi hija. Le cambiado el maestro por una maestra. Esta mujer es especial para educar. En poco tiempo sus alumnos han cambiado un montón. Los enseña con una facilidad, que los alumnos todos cambiaron muchísimo.

Es aquí donde hay tela marinera.

Es muy importante tener un buen profesor, pero tan importante es que los padres controlen y vigilen a los hijos, no solo para darles de comer o hacer que lo pasen bien, sino también para saber cómo van los estudios. Eso es tan importante como el resto de los deberes de los padres. Cierto es que hay que cuidarles y procurarles una vida sana y agradable, pero también lo es conseguir que estudien, porque es tan necesario con el pan de cada día.

Además de enseñarles a que se apliquen, hay que enseñarles que respeten al profesor. Todo esto es muy necesario para que una persona pueda trabajar, enseñar y cumplir con su deber. Hay que dar al profesor un margen de confianza. O somos humanos y nos comportamos y respetamos a cada uno, como queremos que nos respeten a nosotros, o fallamos desconfiando hasta del profesor de nuestros hijos. La forma de enseñar a los niños es muy importante como para jugar con ella, dejando al niño a su merced y que actúe como él cree que debe hacer. No podemos olvidar que nacemos desnudos e inocentes y que vamos a ser en la vida lo que nos enseñen, primero nuestros padres y después al incorporarse a los estudios los profesores. Pero siempre bajo el control de los padres.

Hay un proverbio que dice: el que solo se haya tenido así mismo como profesor, siempre estará como un pollino.

Hay que confiar y creer en las personas, porque si tuviéramos que vivir aislados, solos a nuestras expensas, desde luego lo íbamos a pasar muy mal. No podemos olvidar que todos dependemos unos de otros, de la familia, del profesor que nos enseña, del médico que nos cura, del amigo, del vecino que nos ayuda muchas veces o del que te encuentras por la vida y desinteresadamente te echa un cable cuando lo necesitas. Todos sabemos que algunas veces nos encontramos con sorpresas, eso está muy claro. Pero eso no es óbice para que desconfiemos de todo el mundo. Hay que saber con quién te la juegas y es ahí donde tienes que con mucha vista, valorar al que tienes en frente y procurar saber el comportamiento de cada uno.

Hay que procurar no equivocarse y respetar, cambiando de tercio si fuera necesario, para no actuar sin conocimiento de causa y valorar erróneamente sin causa justificada. Cosa que puede perjudicarnos a nosotros mismos al no darnos cuenta de nuestro propio error. Es bueno controlar y saber cada día lo que ocurre en todos los órdenes de la vida, pero sobre todo lo concerniente a nuestros pequeños, a los que tanto adoramos y queremos. Si la enseñanza en el colegio es importante, tanto lo es la enseñanza de los padres.

El 29 de agosto de 2002, al fin, después de esperar todo el verano por el piso que compramos en Candas, lo inauguramos. A pesar de que nos lo habían entregado el día 23 de ese mismo mes, no lo pudimos ocupar a causa del barniz del parquet, que tardó unos cuantos días en secar y el olor es nocivo. La espera fue larga ya que el promotor de la obra pensaba  entregarlos para el mes de enero pasado, después para marzo, luego para junio, pero no pudo ser hasta agosto. Por ese motivo las vacaciones de ese año fueron cortas y llenas de trabajo. Primero la construcción de mis prótesis y después los trabajos en la finca, y más tarde al entregarnos el piso, amueblarlo y hacer las estanterías para la cochera y la despensa. Hasta hice un tendal para secar la ropa en el interior de una despensa. Este tipo de tendal me lo mostró el contratista de la obra. Una tarde me dijo:

-Arsenio, ven al primero que te voy a mostrar una cosa muy curiosa, seguro que te gusta.

En efecto me gustó. Se trataba de un tendal para ropas en el interior  del piso, desconocido hasta la fecha. Es muy original. Pregunté a los dueños del piso dónde lo habían comprado. Al día siguiente nos acercamos allá con el fin de comprarlo, pero ya no los había. Preguntamos a un responsable de la casa y dijo que había sido una promoción, pero que no iban a traerlos de nuevo. Le dije a mi esposa que yo haría uno en acero inoxidable en lugar de pvc, porque es más seguro, bonito y duradero. Mi esposa dijo que buena gana tenía de trabajar, que ya vendría y si no, nos arreglaríamos con otro cualquiera.

Comencé a buscar el material. Mientras pasaban los días conocí al dueño del primer piso y hablamos acerca de su tendal. Le comenté que ya no los vendían. Le dije que buscaba acero inoxidable para su construcción. Este hombre, muy atento me dijo:

-Tranquilo, yo te lo consigo.

Cogió su móvil y llamó para que aquella tarde o al día siguiente lo trajeran. No pasaron dos horas cuando llegó un mensajero con los tubos. Solo me faltaban unas piezas de acero inoxidable para las bases, pero éstas ya eran más fáciles de conseguir. Cogí el coche y fui hasta los almacenes de Riestra a buscar lo que necesitaba. Al momento lo encontré. Llegué a casa, me puse la funda y a trabajar en el tendal, que terminaría en tres días. Se trataba de 4 bases una a cada lado del secadero, y de siete tubos de acero de 1,50 de largo.

Diseñé un sistema completamente diferente al que conocí, y con mejores prestaciones. Entre otras cosas lleva 14 poleas para que trabaje con facilidad y no se rompan los gruesos cordones. Además de una solida base provista de siete ganchos para que sea más práctico. Estos siete ganchos son los que sostienen cada una de las barras o tubos, que independientemente bajan. Se tiende la ropa, se sube una barra y se baja otra, de forma que la señora lo tiene a su altura para colocarlo. Luego lo retira quedando casi pegado al techo donde no molesta para nada y la ropa se seca perfectamente.

El tendal es una maravilla que llama la atención de todos. Por eso y otras cosas más, pasamos el verano y parte del otoño trabajando, pero a gusto porque nos hacía falta.

Antes de decidirnos a comprar en Candás a habíamos pensado visitar varios lugares de la costa. Comenzamos por Ribadesella para ver donde nos gustaba más comprar el piso. Después de pensarlo y de hacer distintas valoraciones. Le dije a mi esposa que el mejor sitio seria Candás. Por lo bonito que es todo. Una buena playa, con terreno llano y también con alguna pendiente, además de las bonitas praderas ajardinadas y el pequeño bosquecillo de eucaliptos en su parte más alta, desde donde se puede tomar el sol o la sombra e incluso dar un largo paseo.

Aparte de ser un lugar privilegiado por estar situado en el centro de la costa asturiana, tiene buen servicio para viajar. Esta cerca de Oviedo, Gijón, Avilés. Con buen servicio de carreteras, el tren, el ALSA y está muy cerca de Sotrondio. Tiene un  ambulatorio recién construido, buenos restaurantes, buenas sidrerías y comercios en general; hasta hay un cine. Además, está fuera de los barullos y de la contaminación. Es ciertamente un pueblo tranquilo y encontradizo.

Mi esposa dijo que no le gustaba. Yo creo que cuando lo conozcas mejor te va a gustar le dije: lo mejor sería pasar las vacaciones este verano y ya verás si te gusta uno.

En efecto allí pasamos las vacaciones. Al terminarlas dijo: qué razón tienes Arsenio, vaya bien que lo pasamos, esto es muy bonito como tu bien dijiste. Yo por mi seguía aquí y no machamos hasta que construyas el chale o compremos el piso.

-Así será compraremos en Candás. Empezamos a buscar donde edificar. Aunque pasaron tres años y no encontrábamos nada que nos gustaba, tanto le gustaba estar aquí que un día me dijo:

-No creo que te guste nada, lo que tú buscas solo lo conseguirás si lo haces a tu gusto.

-Si hay que hacerlo se hace, no pasa nada, tampoco hay que comprar lo primero que salga.

Al final conseguimos un lugar de los mejores de la zona, pero no sin antes haber dado vueltas y romperse la cabeza. A mí nunca me ha gustado vivir encerrado entre edificios, siempre me han gustado las buenas vistas y el aire libre y aquí lo hay de verdad.

A medida que pasan los años y caminas por la vida, aprendes cosas muchas veces con sorpresas y muy interesantes. He visto un bonito documental de las aves del paraíso que describo por lo agradable e importante que resulta. Sobre todo cuando ves a los animales comportarse y practicar costumbres muy parecidas a las de los humanos. Es algo digno de contemplar.

En Australia hay varias familias de aves que se llaman Aves del Paraíso, creo que este nombre pueda ser por la forma de vida que llevan y sus costumbres tan maravillosas como llamativas. Hay  distintas familias, cada una de diferente color y distinto plumaje, siempre a cuál más bonito. Los machos de una clase son totalmente azules y muy brillantes. Las hembras son de color pardo, tirando a ceniza, aunque con una ligera diferencia entre unas y otras, unas un poco más oscuras y otras más claras. Estos animalitos hacen pareja para toda su vida con la misma hembra. A la hora de cortejar a la que quieren conquistar, actúan de una forma muy curiosa.

En su época de jóvenes conquistadores lo primero que hacen es la casa y la adornan lo mejor posible. La casa de este macho azul es en forma de choza de hierbas y de gran tamaño. Es muy peculiar, redonda con el techo muy bien acoplado y con una ligera pendiente para evitar que las lluvias la mojen. De tal forma que no entran el agua ni los bichos, que puedan molestarles. Tiene un acabado muy fino y llamativo. Además de grande, pues las aves son del tamaño de un urogallo o un poco más, allí se crían los polluelos que al final ocupan gran espacio.

Cuando termina la casa, empieza un trabajo de adorno de su antojana. Limpia todo lo que hay delante de la puerta de entrada, pues siempre la hace en el suelo. Después de esta gran limpieza prepara regalos que ofrecerá a la que puede ser su compañera de por vida. En este caso una colección de distintos objetos, piedras de algún mineral que recoge donde pueda y frutas de distintas clases, pero sobre todo en lugar estratégico, en lo alto de la entrada coloca lo que será como su escudo, su símbolo. Cuelgan de unas ramas unos frutos como ciruelas totalmente azules, igual que su color para que la hembra se fije mejor en él. El resto lo coloca a los dos lados de la entrada de la casa. Todo en una posición muy curiosa y siempre para llamar la atención de la hembra que vendrá a visitarlo cuando él haya terminado, que es cuando la invita a su casa.

Aunque cada clase lo hace de distinta manera, éste en particular, una vez que termina la casa y todo colocado en orden, vuela a un árbol cercano donde espera a la hembra que está observando desde los arboles, buscando su pareja. Éste la mira y en su lengua la invita a volar hasta su casa. La hembra a su llegada entra en la casa, la mira detenidamente, mientras que el macho coge la piedra más bonita y más brillante en su pico y se pone cerca de la entrada, ofreciéndosela a su novia, esperando saber si le acepta el primer regalo.

Puede aceptarlo o no, pero si lo acepta, la hembra depositan la joya en su lugar y vuelan al bosque para aparearse y estar juntos de por vida. Si no le gusta continua la busque de otro vecino que también espera muy cerca de su casa la llegada de la que pueda ser su compañera. Si no es ésta, otra será.

Los hay totalmente negros con una especie de estrella en la parte superior de su cabeza, de la que el macho presume. Cuando le ofrece el primer regalo, lleva la joya en el pico y la cabeza agachada para que le vea la estrella. Los machos de esta clase hacen la casa sin techo en el suelo, aunque muy bien terminadas. También limpia toda la entrada y coloca al lado los regalos, que busca donde pueda.  Cuando ya cree que tiene bastantes, los adorna con flores. Los hay que para evitar el robo de sus vecinos y la destrucción de sus casas vigilan y esperan a la hembra a su lado. Pero éste no lo hace y se va a los árboles a esperarla. Entonces el vecino, que lo vigila desde su casa cercana, aprovecha para robar lo que más le guste y luego se dedica a estropearle la casa. Quita todo lo que puede para que la hembra siga hasta su casa, al ver que la del vecino esta estropeada. Cuando está destruyendo la casa lo hace con rapidez y siempre atento por si llega el amo para que no haya batalla, pues solo luchan para defender su propiedad. El ladrón huye a toda velocidad con lo que puede. Cada clase trabaja a su manera. Hay uno de multicolor, amarillo, blanco y colorado. La verdad es el más bonito y más llamativo y él lo sabe, pues prepara su casa pero no la adorna. Su casa es de palos, pero muy bien colocados, no pierde tanto tiempo como los demás porque sabe que es el más guapo y que la hembra lo aceptará. También prepara algún regalo.

Hay otro que es pinto. Es muy trabajador y no se conforma con cualquier cosa. Hace la casa con un buen techo muy parecido a la del primero. En sus variados vuelos buscando regalos, va hasta el cementerio y coge los pedazos más bonitos que haya de mármol. No se conforma con pocos y termina con un buen montón, además de otros objetos que adorna con un ramo de flores grades. Después de mirarlo le parece que algo le falta y se va en busca de sabe Dios qué, pero la sorpresa es cuando desde un árbol vigila a un grupo de niños que dibujan y escriben en el jardín del colegio. Cuando se marchan llega y coge nada menos que tres tizas en su pico. Se las coloca y se va. Las deja con el resto de las joyas en su casa y vuelve por otro viaje. En éste se lleva un bolígrafo que coloca en el centro de todo aquello, que él considera especial para la que será su compañera, el resto de su vida.

Todos lo hacen a cuál mejor, pero todavía hay otro que no se conforma con los regalos. Además de hacer la casa, la decora por dentro con pintura que el mismo fabrica masticando unas ramas. Después pinta con su pico el interior de la casa, para enamorará a la hembra con más facilidad. Cuando le vita le presenta lo bien pintado y le entrega el primer regalo presumiendo ante la hembra. Si lo admite le indica que le vale. Ya se van de luna de miel por el bosque.

Todo esto lo hacen los machos al pasar de polluelos “a mozos” pero no sin antes aprender bien a trabajar y construir casas. A pesar de que hoy ya son enemigos por lo de la conquista, mientras que fueron pollos se ayudaron unos a otros en grupos de cinco o seis como si fueran hermanos, trabajando en equipo en las prácticas y en la construcción de lo que les hará maestros para el día que formen una familia. Así hay animales con una inteligencia digna de contemplar. No son guerreros, son muy sociables hasta que llega la hora de la conquista que se convierten en enemigos.

El domingo 11 de agosto de 2002 por fin salió el sol como si fuera a durar todo el día, pues el cielo  amaneció azul, cosa que echamos de menos, porque todo ese verano fue gris y no paró de llover. Fueron escasos los días de sol. Se cree que desde hacía cuarenta años no había venido tan mal tiempo, eso dijeron en los medios informativos.

Después de atender al ganado que tenemos en la finca, solo unos pollos, las gallinas, el ternero y los dos cerdos para el samartín y media docena de ovejas para pastar la finca, además de los cuatro mastines. Mi esposa y yo decidimos ir a dar una vuelta por Candás donde estaríamos hasta las cinco de la tarde para salir después a Gijón, que por cierto había tanta gente que no había donde aparcar el coche. Después de dar varias vueltas pude aparcar en las praderas cercanas a la Feria de Muestras.

Luego dimos un paseo por el muro de San Lorenzo y subimos hasta el Rinconín. Allí contemplamos el monumento a la Madre del Emigrante, que siempre nos ha llamado la atención por el gran significado que tiene. La mujer está despidiendo a su hijo y mira a los lejanos horizontes del Cantábrico con cara de pena por ser la Madre del Emigrante. Yo considero este monumento muy importante.

Otro monumento importante es el la Villa de Candás. La madre y el Niño mirando al mar. Donde perdieron la vida muchos pescadores en el cumplimiento del deber y luchando contra las inclemencias del tiempo y la bravura del Cantábrico.

Me causan sensación y los admiro, pero mi pregunta es: ¿por qué los mineros no tenemos otro monumento a nuestras Madres? A lo largo de la historia de los mineros, se ha visto cómo van cayendo sus hijos bajo las entrañas de la tierra, mientras que otros se mueren de muy jóvenes por la temible silicosis, producida por el polvo del carbón, además de los múltiples accidentes en los que perdieron piernas y brazos. Accidentes de diversas formas Creo que también las madres de los mineros deberían tener ese monumento.

Sentados mi esposa y yo en el mismo muro, contemplando a la madre del emigrante, allá en el Rinconin para descansar de la larga caminata. Recordamos aquellos tiempos cuando nuestros hijos eran niños y allí mismo, en la pequeña playa del Rinconín, les enseñé a nadar. Todo esto lo recordamos con nostalgia y, como la madre del Emigrante, miramos a las oscuras aguas del mar pensando que allá en la otra orilla están nuestros seres queridos. Se encuentran muy lejos de su tierra, a orillas del Atlántico Norte, en las tierras de Escocia. Aquí, al lado de la Madre del Emigrante, al igual que ella sentimos nostalgia y morriña por los nuestros que han tenido que emigrar para buscarse el medio de vida que en nuestra tierra no es posible por la grabe crisis que hay al cerrar las minas de carbón y con ellas multitud de industrias que dejaron a toda Asturias en la pobreza.

La emigración ha sido muy elevada y sobre todo de gente con carreras. Solamente de mi familia se encuentran fuera de su tierra seis personas. Un médico, un ingeniero, una profesora de Ingles y francés, otra profesora de alemán, ingles y francés, un economista y una de química y física.

Después de contemplar todo aquello regresamos de nuevo hasta la playa donde nos esperaban unos amigos que nos llamaron al móvil. Después de encontrarnos con aquellos amigos dimos un  paseo a pesar del fuerte aire que soplaba. De momento empezó con tanta fuerza que arrastraba cantidad de nubes desde poniente hacia oriente, quedando muy rápido todo oscuro. Aquel aire con su bravura, barría hasta los vasos de refresco que estábamos tomando en unas de las terrazas cercanas al paseo de la playa.

Ya no apetecía estar por allí. Nos despedimos de los amigos y salimos a por el coche. Viendo el atasco de coches tan grande que se había, pensamos que no saldríamos en menos de una hora de aquella caravana. Al final solo tardamos media hora en salir a la autopista, pero no sin ver alguna de las salvajadas al volante de algún conductor que siempre quiere ser el más y el mejor, sin darse cuenta del peligro que suponen esas maniobras a gran velocidad, despreciando a la seguridad  y a la misma gente que con asombro lo miramos. Da pena ver este tipo de locura, e impasible no puedes ponerle remedio.