La decepción de un trabajador al retirase puede ser algunas veces demasiado dura.
Durante todo el otoño y el invierno me dediqué a escribir, ya que durante el resto del año no había tenido tiempo. Me había dedicado a trabajar en la finca y algunas cosas de artesanía.
Dado que pase escribiendo en el ordenador mucho tiempo, mi esposa me decía que no debía estar tantas horas al ordenador, decidimos salir a dar un paseo de hora y media para volver a escribir.
En aquel paseo nos encontramos con un señor de mi edad que también había sido minero, aunque de otra zona. Después de contarnos que en el fin de semana había estado cenando por nuestro valle del alto Nalón y que le había gustado mucho porque había mucho ambiente. Dijo que aparte de lo bonito de aquel valle, le gustaba salir porque se aburría mucho ya que donde vive actualmente no tiene nada que trabajar. Se sentía muy decepcionado. Dijo que a su edad de 70 años para donde iba ir. Que poco o nada podía hacer. No le gusta leer el periódico ni ningún libro, solo ver los partes en la T.V. y luego al paseo y al bar.
Todo eso lo decía desmoralizado, muy bajo de forma. Desde luego que el señor estaba por lo menos a primera vista, muy bien conservado. Hacía poco tiempo que le conocía y me pareció buena persona por lo que sentí cierta pena de lo desanimado que se encontraba. Aquella conversación me hizo reflexionar una vez más sobre la forma de vida que cada uno escogemos sin darse cuenta del perjuicio que algunas veces nos vaya producir.
De toda la vida del hombre trabajador se sabe que al retirarse, se pasa muy mal por dejar su trabajo habitual. Eso puede ser muy grave para algunos por qué no se adatan a la nueva vida sin hacer nada. Es necesario seguir con alguna ocupación porque nos sirve para pasar el tiempo y sentirnos útiles y optimistas. Está demostrado que algunas veces demasiado tiempo libre hace al hombre triste y solitario. Hay que evitarlo. Yo mismo no soporto estar sin hacer nada. El trabajo es la mayor diversión para mí. Aparte de lo necesario que es, mientras trabajo o escribo me siento perfectamente y muy entretenido. Una de las frases de aquel hombre fue. ¿A dónde voy a ir a esta edad?
-A muchas partes puedes ir le dije: se pueden hacer muchas cosas. Todo está en no perder la paciencia, hay muchas formas de pasar el tiempo. El tema está en saber organizarse para no perder el hábito de trabajar, de moverse porque es de un valor incalculable. Es necesario pensar en cosas positivas y olvidarse de lo negativo, aunque esto parezca imposible, es importantísimo. Todo está en saber regular los pensamientos. Nuestro cerebro es como un ordenador, procesa datos a velocidad del rayo. Por esa causa hay que aprender a dominar nuestros impulsos. Aunque parece imposible, no lo es. Como todas las cosas hay que practicarlo. Sin ninguna duda es una buena forma de vivir con más optimismo con más alegría. Es necesario dejar la mente en blanco algunas veces para luego pensar en cosas agradables y eliminar los malos recuerdos.
La vida muchas veces nos presenta sorpresas y sufrimientos que se pueden combatir con energía y decisión, si uno mismo se lo propone.
Hay tiempo para trabajar en alguna cosa, para leer un buen libro, para pasear o ir a tomar el café, ver la T.V. y hasta para dormir bien. Y también para hacer un poco de ejercicio por lo saludable y necesario que es para mantener nuestro cuerpo en forma y no tener dolores de articulaciones. Es necesario hacer ejercicios todos los días para no convertirse en un viejo prematuro.
En una de mis visitas a mi hermana Laudina que vive en la casa paterna en la montaña, me dijo: hermano tú estás como un chaval, yo que soy un año más joven parezco tu madre y tengo un montón de dolores que no me dejan hacer nada. Baya suerte que tienes me dijo.
Laudina, no se trata de la suerte sino del movimiento de cada día. Si pones arte y haces todos los días ejercicios, volverás a moverte como antes. Todos esos dolores que te atacan, son por la falta de ejercicios. El cuerpo es muy vago y si no se le da movimiento se atrofian los músculos y articulaciones y por eso salen esos dolores. Te prometo que si hacer lo que te voy a enseñar, en pocos días dejaran de atormentarte esos dolores y ese mal estar que te producen.
Me quite la chaqueta, me tumbe en una alfombra y le enseñe como se hacen los ejercicios. Y le asegure que en diez o doce días estaría como una chavala. No te olvides Laudina de hacer lo que te acabo de enseñar. Estos ejercicios son como un milagro para la salud.
Después de unos días volví a verla y me dio un abrazo. Muy contenta me dijo: hermano estoy muy bien, me pasaron los dolores y ando como antes. Es increíble lo que me valió tu consejo. Tú tenias que ser médico sabes de todo, por eso te conservas también. Todos dicen. ¿Cómo se arreglara Arsenio? para estar tan joven y tan guapo, parece como si los años no pasaran para él.
Cuando te hablen de esos temas les dices que la mejor forma para estar bien y sin dolores es el trabajar algo y si no se puede, haciendo esos ejercicios que te quitaron los dolores y te volvieron a la normalidad. Aunque haya que hacerlo todos los días unos minutos, ya ves que son muy simples pero muy buenos.
Hay que moverse y comer lo normal y no beber alcohol en exceso. Los borrachos, fumadores, vagos y tragones viven menos. Eso es conocido de toda la vida.
Un buen consejo para no comer demasiado, no engordar y mantenerse sano, es el comer muy despacio. Masticar bien la comida y beber agua o un pequeño vaso de vino. Aparte de que es muy sano ayuda hacer mejor la digestión. Al comer despacio le damos al cuerpo tiempo para asimilar los alimentos y se llena muy pronto. Si se come de prisa no le da tiempo a controlar el exceso de alimentos y se come más de lo que necesitamos. Los excesos son malos en todos los órdenes de la vida. El comer y beber demasiado, o comer muy poco, que también es el problema de algunas personas que quieren mantener un fino tipo, pero eso es peligroso si no lo controla un médico. Por comer muy poco se puede caer en una anorexia y eso en algunos casos no se puede curar y hasta puede ser mortal. Para adelgazar siempre debe ser controlado por un buen especialista en esos temas.
Otra de las cosas muy importe es el no dar demasiada importancia a simples cosas. Mientras que no exista el problema no le des importancia, sigue tu rumbo con optimismo. Es muy conveniente algunas veces intentar educar y cambiar los pensamientos tristes. Es mejor pensar en los agradables, siempre hay que vivir con una ilusión. Todo esto que acabo de decir es el fruto de la experiencia, hay que seguir adelante y frenar esos impulsos negativos. Si se sabe hacer, se consigue vivir más alegre y más tranquilo. El optimismo es fundamental. Si se quiere siempre hay algo que hacer. Hay que romperse la cabeza en resolver los problemas no en creárselos.
Si te quedas en una esquina pensando en la edad o en los problemas del pasado, puedes llegar a perder el norte, y eso hay que evitarlo. Con los recuerdos del pasado ya no se vive. Hay personas que viven prisioneras de los malos recuerdos y llenas de odio, por lo que viven atormentadas y sin que le sirvan ni los consejos de los demás, y eso les destroza la vida. Sin darse cuenta del tremendo problema que padecen. Sabiendo combatirlo podría tener remedio para vivir con tranquilidad y dinamismo.
El odio y la envidia es una de las peores enfermedades que puedan a tacar a una persona. Así lo dice la literatura y la experiencia de los que somos mayores. Lo malo de todo esto es que no solo lo padecen algunas personas mayores, también algunos jóvenes. Si los consejos de la familia no te sirven, acude a un buen especialista y con seguridad que te va ayudar y sacarte de esa tortura. Nunca es tarde para salir de los problemas, si se pone interés. Prueba y veras que es verdad, mucha gente lo consiguió. Con tiempo y mucha paciencia se pueden conseguir muchas cosas por imposible que nos parezcan.
Conocí hombres bravos, fuertes y muy trabajadores que al llegar a los 70 años o menos, sin darse cuenta se perdieron en el abismo, sumidos en el sufrimiento y el miedo a la vejez. De la noche a la mañana sin darse cuenta del problema cayeron en depresión, sufriendo y llorando como niños. Da pena ver estas cosas pero ocurren. Por eso hay que tener mucho cuidado al me terse en edad.
Es importantísimo, olvidarse de los problemas que la vida nos dio, por muy duros que hayan sido. Con el pasado ya no se vive, con el presente sí.
Es impresionante lo rápido que ocurren las cosas. Hace unos días fui a buscar harina a un molino donde hace años que compro la harina de trigo para hacer el pan de casa. Esta vez no estaba el señor que siempre trabajaba en sus molinos. Me aten dio su hija. Le pregunte por su padre y con sorpresa me dijo que estaba en una residencia de ancianos por que le ataco un ictus y le dejo mal de la parte izquierda. Lo siento mucho, que pena estaba perfecta mente. Saluda lo cuando vayas a verlo de mi parte.
No puedo porque llora mucho, no es capaz de soportarlo y mucho menos cuando le hablamos de sus amigos y conocidos.
Es tremendo el cambio tan rápido que la vida nos da algunas veces. Yo creo que un caso como este, aparte del tratamiento que le dará su médico, Seria muy importante el tratarlo sicológica mente todos los días por un técnico del ramo, para levantarle la moral y enseñarle la forma de recuperación. Eso en casos grabes es tan importante como la medicina. Si no se lee en seña y se acompaña durante un tiempo, es posible que no se recupere más.
Este artículo que presento, es precisamente basado en mi propia experiencia, por la tremenda lucha que a trabes de mi vida tuve que soportar. Duras etapas por las que sufrí lo indecible, pero que con paciencia y resinación pude combatir y salir adelante.
Si primero lo pase fatal por varios accidentes de mina siendo muy joven y después por la pérdida de las manos y un poco más tarde el perder a dos hermanos jóvenes también por la mina.
Hay que ver que ya se murieron ocho de mis hermanos además de mis padres. Una cadena de serios problemas que me costó muchísimo el soportar, pero como la vida tiene que seguir, no me quedo más remedio que ponerme las pilas y a luchar amigo, porque si te cohíbes es peor.
Otro tema que creo necesario comentar, es que después de tanto sufrimiento, tanta lucha, hace al hombre más fuerte. Parece increíble pero es cierto.
Cuando éramos niños, nos bajaron de la montaña a cinco hermanos montados en un burro, a vacunarnos al botiquín en Sotrondio. Yo como todos pase mucho miedo. En cabio depuse de pasar por tanto sufrimiento aguanto tanto como para parecerles imposible a los médicos.
Cuando me iba a casar, un mes antes me salió un panalizo en el dedo gordo del pie derecho. Lo aguante trabajando unos cuantos días y sin curarlo ni ir al médico. Hasta que un día ya no podía andar. Había una tremenda infección que ya era hasta peligrosa. Cuando mis padres me vieron que no podía ni moverme, un día a las 8 de la tarde ya de noche llamaron un taxi. Me acompaño mi cuñado Marcelo al botiquín.
Cuando ya estaba en la mesa de opresiones Geremias me iba anestesiar.
Lo dije: no hace falta ninguna anestesia, tú corta lo que haga falta que yo no moveré ni un pie.
Imposible, hay una enorme infección que para dejarlo bien tengo que dejarte el hueso casi desnudo. Si tardas un poco más de tiempo en venir habría que amputar el dedo por no venir primero. Sin anestesia no ha caballo que lo aguante.
Ya comprobaras que es cierro, lo aguanto y sin problemas, ni me voy a mover ni a quejar de nada. Siguió sin creerme hasta que mi cuñado le dijo.
-Es verdad, aguanta como si le cortas el dedo. Es imposible lo que este hombre es capaz de soportar, no se puede creer si no sebe.
Geremias dijo: no te pondré anestesia pero te voy atar de pies y manos, no baya ser que me días un trallazo con tus manos de acero.
Yo nunca pegue a nadie y menos a ti que me vas a curar. Tranquilo no hay problema, te prometo una vez mas que no moveré ni un pie, soy hombre firme y no fallo en lo que digo. Átame como quieras, pero sin anestesia. Ya me lo pusieron muchas veces por mis accidentes de trabajo y varias operaciones. Eter, Cloroformo, Raqui. Pienso que todo eso a la larga será muy malo para el ser humano, prefiero aguantar. Además el aguantar es cosa de mentalizarse, después de muchos palos, uno se acostumbra y sufre menos.
Cuando termino la intervención, me dijo: es imposible lo que aguantas muchacho. Perdona para probarte, pinche con el bisturí muy fuerte para probarte. Ni moviste el pie ni te quejaste. En mi carrera jamás vi un hombre que aguante tanto.
Las pase duras y eso hacer al hombre más fuerte. Una forma de ayuda para aguantar los dolores es el morder el pañuelo. Así lo hice en varias ocasiones pero sobre todo en el tiempo de mi rehabilitación. Los ejercicios para conseguir mover el cubito y el radio de mis muñecas, fueron de largo tiempo y muy dolorosas, pero me aprendieron a soportarlo.
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